En la serie Hatfields and McCoys, todo se inicia en la batalla de Devil’s Backbone, Virginia, 1863. ‘Devil’ Anse Hatfield (Bill Paxton) eran vecinos y buenos compañeros durante la guerra civil, luchando en las filas de los confederados; pero tras sus respectivos regresos a sus hogares (Anse deserta del ejército; Randall cae prisionero de los yanquis) se impondrá un contexto de crecientes tensiones, malos entendidos, resentimientos y asesinatos premeditados que pronto harán estallar una verdadera guerra entre las dos familias.
) y Randolph ‘Randall’ McCoy (La disputa entre los Hatfield, de West Virginia, y los McCoy, de Kentucky, entrará en su peor período tras descubrirse la relación amorosa entre Johnse Hatfield (Matt Barr) y Roseanna McCoy, (Lindsay Pulsipher) hijos respectivamente de Anse y Randall, protagonistas de una historia de amor destinada al fracaso. Desde ese momento, los enfrentamientos se suceden cada vez con mayor intensidad, dejando tras sí una larga estela de muertes en ambos bandos.
Nancy McCoy (Jena Malone), sobrina de Randall McCoy, será uno de los personajes clave de la trama, en su búsqueda de venganza por el asesinato de su padre, Asa Harmon, a manos de Jim Vance (Tom Berenger), el violento tío de ‘Devil’ Anse Hatfield. El abogado Perry Cline (Ronan Vibert), primo de Randall, y el cazarecompensas ‘Bad’ Frank Williams (Andrew Howard) también serán partícipes de la escalada de violencia entre ambas familias.
Si bien los Hatfield y los McCoy se odiaban mutuamente y en apariencia los separaban grandes diferencias, tenían bastante en común: estaban totalmente de acuerdo en que la violencia era la manera apropiada de resolver los problemas. En este relato no hay héroes ni villanos, o en todo caso, todos se muestran capaces de lo mejor y lo peor, ya sea por acción, omisión o ignorancia.